COMUNICADO DE LA COORDINADORA “LA CIUDAD SOMOS QUIENES LA HABITAMOS”
ACERCA DE LA CONVOCATORIA DEL 15/04 PARA LA SELECCIÓN DE 30 IDEAS ESTRATÉGICAS
El Gobierno de La Ciudad de Buenos convoca a una reunión para la selección de 30 ideas estratégicas (2 por comuna) para la ciudad de Buenos Aires tomando como base el trabajo realizado por las Juntas Comunales, los Consejos Consultivos y habitantes de las comunas durante el proceso de actualización del PUA lanzado el año pasado por el CGBA.
¿En qué circunstancias se da esta convocatoria?
· El documento base de diagnóstico solo fue remitido a las Juntas Comunales para revisión. Se ignoró a los Consejos Consultivos como órganos de democracia participativa y a los habitantes de las comunas que participaron en el esfuerzo. Siendo así, la gran mayoría de las personas involucradas no tuvieron tiempo ni oportunidad de leer y comentar el documento, ni se pudieron socializar los aportes y proceder a un debate profundo sobre propuestas entre todos los sectores representados.
· El documento provisorio de preselección de ideas, también remitido a las JC, no incluye todas las propuestas, y no se sabe cuál fue el criterio de preselección. Se nota por ahora, que se omiten propuestas de gran impacto para muchos habitantes de las comunas y se incluyen otras de importancia mucho menor. Surgen preguntas: ¿por quién y cuándo será completada la lista? ¿Cómo y sobre todo por qué seleccionar 2 ideas, cuando el objetivo del esfuerzo es elaborar planes de comunas que sirvan de guía para acciones e inversiones durante varios años?
Siendo así, consideramos inoportuno y contraproducente proceder ahora a un proceso de selección inútil y necesariamente reductor, cuando el momento es de enriquecimiento, socialización y consolidación de los resultados alcanzados.
Por otro lado, no se entiende la referencia a la selección de ideas estratégicas, cuando lo que se hizo hasta ahora fue hacer un relevamiento de problemas y propuestas preliminares, sin nunca abordar una visión estratégica de la comuna integrada a la ciudad.
La participación ciudadana y el planeamiento de la ciudad no pueden ser reducidos a un ejercicio en el cual las personas participan a ciegas, sin recibir información completa y sin el tiempo suficiente, y donde se imponen métodos de trabajo rígidos que no fueron debatidos. Hay otras formas de trabajar, pero la mayoría de los participantes las desconoce. Afortunadamente, a pesar de las debilidades del proceso en los aspectos metodológicos, de la falta de respeto a la democracia participativa consagrada en la ley 1777 de comunas y en la CCABA, la vitalidad de la ciudadanía organizada permitió reunir aportes valiosos. Llegó el momento de capitalizarlos y de ampliar la participación.
Por todos estos motivos, consideramos necesario un cambio de enfoque para la convocatoria del 15/04.
Si queremos instituir la participación en serio, tomemos el proceso ya desarrollado hasta ahora como un anticipo, consideremos las propuestas ciudadanas reunidas, y sigamos ya con otra perspectiva.
En este sentido, la Coordinadora “La Ciudad somos quienes la Habitamos” propone:
Que la convocatoria del 15/04, en lugar de realizar la selección de ideas, se dedique a definir una agenda para la continuación del trabajo y una metodología que permita la elaboración de planes realmente participativos, que atiendan las necesidades de la mayoría, de acuerdo con los principios de equidad, sustentabilidad ambiental y justicia social. Planes integrados a una visión estratégica en el contexto urbano y metropolitano. Esto solo puede hacerse con información sustantiva, detallada y anticipada, con diseño metodológico, encuadre de coordinación y dinámica diferentes. Esto es, abramos un debate en serio, acerca de qué proceso necesitamos para pensar qué ciudad queremos, y desde allí formulemos las propuestas para las comunas inscriptas en la ciudad en su conjunto.
Puntos básicos para empezar esta nueva fase del proceso después del 15/04:
1) Amplia difusión del documento de diagnóstico y propuestas a Consejos Consultivos Comunales, organizaciones de la sociedad civil y residentes de las comunas, con plazo suficiente para permitir su revisión y enriquecimiento.
2) Que se dé a conocer a las comunas (JC, CCC, organizaciones y habitantes) un documento sintético y accesible que incluya los avances del trabajo en las dimensiones metropolitana y estratégica de la ciudad, que permita una interacción entre los diferentes niveles del proceso.
3) Que se organicen reuniones en cada comuna para la consolidación del diagnóstico y la identificación de propuestas por comunas. Las reuniones deben ampliar la participación ciudadana a partir del protagonismo y centralidad de los órganos participativos. Las comunas tienen en promedio 200.000 habitantes, pero solo participaron alrededor de 120 personas en cada comuna, apenas el 0,06%.
La revisión del PUA debía empezar 5 años después de su aprobación, o sea en 2011. Después de 10 años de demora, el GCBA resolvió lanzar la actualización en plena pandemia, lo que nos priva de formas de participación creativas y abarcadoras e impuso metas y plazos que no son compatibles con el alcance y la importancia que tiene la actualización del Plan Urbano Ambiental.
¿Por qué apurar los tiempos? Queremos creer que lo que se busca no es una serie de lindas fotografías, y esperamos que de todo el proceso no nos queden horas de videos y papelitos de colores, sino resultados tangibles y ciudadanos más unidos por objetivos comunes.
La democracia participativa, inscrita en la constitución y en el PUA, siempre encontró trabas como el desfinanciamiento de las comunas, un proceso de toma de decisiones cada vez más discrecional y concentrado por parte del GCBA y la negación del derecho a la información entre otras. Hoy se ve amenazada de muerte por la aprobación de Ley Nº 1166-D-2020, mal llamada “Ley de Participación Ciudadana”, que remite al ejecutivo la decisión de cómo y cuándo activar la participación.
Mas allá de los Planes de Comunas, hacemos extensivas estas consideraciones a todo el proceso de actualización del PUA. Desde la Coordinadora “la Ciudad Somos quienes la Habitamos, proponemos un planeamiento estratégico contextualizado, una Ciudad integrada, sustentable y sostenible, no como eslogan sino como respuesta responsable que defina esa ciudad, con una participación ciudadana cierta, inclusiva, plural y que pueda incidir de manera positiva en la ciudad, para quienes la habitan en el presente y para las generaciones futuras.
Por eso, debemos ir por más democracia y más participación-
¡Tomemos el tiempo necesario y las decisiones pertinentes para corregir el rumbo, a fin de lograr un PUA realmente participativo e inclusivo!