Macri no va en tren, va en Metrobus, una cuestión de marketing urbano

Por Marcos Zelaya y Jonatan Emanuel Baldiviezo. La campaña electoral de Mauricio Macri tiene como uno de sus ejes centrales el marketing urbano, que consiste en mostrar vistosas intervenciones en el espacio público.

Movilidad Transporte

Macri no va en tren, va en Metrobus, una cuestión de marketing urbano

Por Marcos Zelaya y Jonatan Emanuel Baldiviezo. La campaña electoral de Mauricio Macri tiene como uno de sus ejes centrales el marketing urbano, que consiste en mostrar vistosas intervenciones en el espacio público. 

En esta oportunidad y con miras al 2015, las estrellas van a ser los cuatro nuevos corredores del Metrobus (Cabildo/Maipú, San Martín, Paseo Colón y Au. 25 de Mayo), que prevé inaugurar en cadena, siguiendo la secuencia de las citas a las urnas (las PASO, primera y segunda vuelta). 

El 1 y 2 de septiembre se conoció el llamado a licitación pública para el Metrobus San Martin y el Metrobus Norte (Cabildo/Maipú), respectivamente. Como es habitual en la gestión de Mauricio Macri, estas obras no dejan de estar rodeadas de polémica, irregularidades y objeciones. Con respecto a los otros dos corredores, aún no se realizó el llamado a licitación.

Es necesario aclarar que la discusión no es “Metrobus sí, Metrobus no”, sino que las observaciones se realizan en cuanto a la implementación concreta de los corredores. A esta altura, no es necesario ahondar mucho en la discusión sobre qué es un Metrobus para Macri. Cualquier usuario puede fácilmente comprobar que no es un nuevo modo de transporte ni un servicio distinto, sino que son carriles exclusivos por donde circulan las líneas de colectivos ya existentes con paradores carísimos. El beneficio de los carriles exclusivos no es discutible y en el caso del Metrobus de Juan B. Justo es muy satisfactorio.  

Irregularidades a la vista

Los elevados costos de las obras públicas son una constante en el Gobierno de Mauricio Macri. Cada uno de los paradores en el último Metrobus (9 de Julio) tuvo un 1 millón dólares. En esa oportunidad en un recorrido de 3 km. se gastaron $114.000.000 en concepto de paradores/estaciones, esto es $38.000.000 por Km.,  a lo cual hay que sumar los costos de asfalto.

El Metrobus Norte, en los mismos conceptos tiene un costo por Km de $ 40.921.106 por cada  km., a lo cual hay que sumar los costos de asfalto. Para la realización de este tramo norte, el municipio de Vicente López, cuyo intendente es Jorge Macri, primo de Mauricio Macri y también miembro del Pro, sólo aportará $ 30.000.000 de los aproximadamente $ 109.873.171 que corresponderían a los 2,70 Km. del corredor norte.  Monto que ni siquiera alcanza para pagar un kilómetro de dicho tramo del corredor. Todo esto en virtud de un convenio firmado entre las dos jurisdicciones.

Pero es más llamativo, que en el mismo momento se estén presupuestando en el Metrobus San Martin $ 12.686.571 por Km.

Asimismo, las Obras del Metrobus Norte y el Metrobus San Martin fueron consideradas por la Agencia de Protección Ambiental de la Ciudad como obras “sin relevante efecto”, que lesionan los derechos de los ciudadanos a participar en los asuntos públicos y participar en audiencia pública. Recordemos que las obras del METROBUS 9 DE JULIO fueron consideradas de “relevante efecto” y se vieron sometidas al Estudio de Impacto Ambiental y a una Audiencia Pública, tras lo que obtuvieron el Certificado de aptitud ambiental. 

Este requisito no es meramente formal ya que las dos obras se emplazan en una zona inundable, donde los carriles, canteros y estaciones modifican el escurrimiento normal del agua de lluvia. Del mismo modo, para la obra de METROBUS 9 DE JULIO, incluso habiendo realizado el Estudio de Impacto Ambiental, no estuvo previsto este aspecto, llegando así a afectar la línea B del Subterráneo, en la cual se realizaron obras hidráulicas, encareciendo aún más el proyecto al abultado monto inicial.

En Vicente López, el convenio firmado con Ciudad respecto al Metrobus Norte fue aprobado por ordenanza y se ha realizado evaluación de impacto ambiental con consulta pública. Ambas exigencias no están siendo respetadas. El estudio de impacto ambiental ha sido denunciado por los vecinos por no tener análisis suficientes respecto a los impactos en el tránsito y nula contemplación a la cuestión de las inundaciones. Pese a esto, la Legislatura aprobó el Convenio sin tener conocimiento de los estudios técnicos que llevaron a determinar las cláusulas del convenio, las obras estipuladas y los montos allí establecidos.

b) Las obras comenzaron a ejecutarse y se convoca a licitación sin que se haya aprobado el convenio firmado entre la Ciudad y Vicente López por parte de la Legislatura de la Ciudad, violando el Articulo 80 de la Constitución de la Ciudad. En dicho convenio se establece que la Ciudad contratará la empresa que realizará las obras a ejecutar tanto en la Ciudad como el partido del norte del Gran Buenos Aires. La Legislatura de la Ciudad aún no elevó la conveniencia del acuerdo para la Ciudad ni aprobó el convenio.

El Metrobus de Paseo Colón también tuvo fuertes resistencias vecinal. El corredor implica la demolición de varios edificios residenciales y educativos. Algunas de las expropiaciones necesarias fueron paralizadas por la justicia de la Ciudad, hecho que ha impedido el avance del proyecto. En este corredor existen proyectos alternativos para extender el SUBTE o instalar tranvías. Ninguna de estas propuestas fue evaluada por el macrismo ni ha puesto en discusión participativa el proyecto del Metrobus de Paseo Colón que nadie conoce en su integridad.

La violación de la constitución de la Ciudad y leyes ambientales, y la fiesta de las obras publicas son los “detalles” que el aceitado Marketing Político de Mauricio Macri va a tratar de ocultar. La discusión democrática y participativa sobre qué sistema necesita la Ciudad y el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) parece ser una pérdida de tiempo para una administración que se declara en “tiempo de campaña”.